Cantadores de Rosario
Sobre el origen del Rosario Wikipedia hace referencia de la
existencia de un manuscrito de 1501, conservado en la biblioteca de Múnich, en
el que se indica que el rosario tuvo su origen primero en la Orden de San Benito, y que posteriormente se consolidó por obra de la Orden de los Cartujos, y se expandió por acción de los dominicos. En los monasterios se solían
recitar los 150 salmos en el Breviario monástico,
pero a los fieles o hermanos que no eran sacerdotes ni monjes, al no poder seguir esta devoción (porque en su
mayoría no sabía leer) se les enseñó una práctica más sencilla: la de recitar
150 avemarías. Esta
devoción tomó el nombre de «Salterio de la Virgen».
La popularidad y desarrollo del rosario se produjo en
el siglo XIII, durante la oposición al movimiento albigense o catarismo. Los
cátaros o albigenses no reconocían ningún dogma relacionado con la Virgen María
y se negaban a venerarla. Ante los enfrentamientos entre católicos y
albigenses, Domingo de Guzmán, fundador de la orden de los Predicadores (más conocidos como dominicos), parece
haber promovido en sus misiones el rezo de una forma primitiva del rosario. Al
ser los dominicos una orden de predicadores y estar siempre en medio del pueblo, su devoción se hizo
popular, generando la aparición de cofradías y grupos de
devotos por doquier, junto con relatos de milagros que
acrecentaron su fama. Aunque la devoción decayó durante el siglo XIV, la orden
de los Predicadores siguió fomentándola.
Fue la batalla de Lepanto la que causó que la Iglesia católica celebrara una
fiesta anual al rezo del rosario, ya que el papa Pío V atribuyó la
victoria de los cristianos sobre los turcos a la intercesión de la
Virgen María mediante el rezo del rosario. La fiesta fue instituida el 7 de octubre. Primero se
la llamó «Nuestra Señora de las Victorias», pero el papa Gregorio XIII modificó el
nombre de la solemnidad por el de «Nuestra Señora del Rosario».
Un fenómeno muy importante en torno a esta devoción
fue el de los rosarios públicos o callejeros, que surgieron en Sevilla en 1690
y se extendieron muy pronto por España y sus colonias americanas. Eran cortejos
precedidos por una cruz, que contaban con faroles de mano y faroles de asta
para alumbrar los coros, y que estaban presididos por la insignia mariana
denominada Simpecado. Fue la principal referencia de la devoción y en
Sevilla llegó a haber en el siglo XVIII más de 150 cortejos que diariamente
hacían su estación por las calles rezando y cantando las avemarías y los
misterios. Los domingos y festivos salían de madrugada o a la aurora. Al
principio eran masculinos, pero ya en el primer tercio del XVIII aparecieron
los primeros Rosarios de mujeres que salían los festivos por la tarde.
En Pueblo Llano la devoción por la Virgen del Rosario
es muy antigua, hay documentos que indican que su presencia data, por lo menos
desde 1683, pues para esa fecha el encomendero Lucas de Laguado hace su
testamento y manifiesta que ...tiene en Pueblo Llano varias casas,
una de ellas que le sirve de despensa con dos cuartos que tienen dos puertas,
una de madera y otra de cuero con el candado... Uno de estos cuartos servía
como capilla donde se encontraba un
cuadro de Nuestra Señora del Rosario.
Siendo encomendero Lucas de Laguado, asumió
la doctrina de Pueblo Llano y Santo Domingo el Bachiller Victorino Miguel
Calderón de La Barca, que también era devoto de la Virgen del Rosario,
construyó una capilla y colocó una imagen en El Cerrito, actual meseta donde se
encuentra el cementerio viejo, bajo la advocación de La Chiquinquirá, tal como
lo hace ver en su testamento elaborado en 1717: ...Ítem. Declaro por bienes
míos la Santísima imagen de Chiquinquirá que está en el cerrito, mando a
mis albaceas la dejen en la capilla en que está colocada por ser así mi
voluntad y se le dé un frontal de felpa listado que tengo....
De ahí que, junto con las imágenes, la
enseñanza del Rosario era una labor cotidiana de los doctrineros, la mayoría de
ellos españoles, que trajeron a América, rezos, canticos, procesiones y todo
tipo de celebraciones que se realizaban en el viejo mundo en homenaje a la
Virgen del Rosario y otros santos.
El Rosario o
rezos en general que se conoce en este Municipio tiene algunas variantes que se
conservan y otras han desaparecido con el transcurrir del tiempo. En los
hogares cristianos se rezan los misterios que corresponden a cada día de la
semana, los gozosos los lunes y sábado, los dolorosos, martes y viernes,
luminosos el jueves y gloriosos el miércoles y domingo. En las paraduras de
Niño se entonan los gozosos y en el novenario de difuntos los dolorosos.
Ahora bien, aparte del tradicional rosario rezado está el
cantado que generalmente se entona en dos ocasiones: para el velorio, novenario
y cabo de año de un finado, recibe el
nombre de rosario doloroso o de ánimas y el que interpretan en el velorio de un
santo o Virgen, este último recibe el nombre de rosario glorioso.
Rosario doloroso o de ánimas
Con respecto al rosario doloroso o de ánimas, en Pueblo
Llano se distinguen dos formas de interpretarlo, uno que fue el que enseñaron a
los indígenas y hoy se conoce como el rosario
de los chepos (porque los que lo
interpretaban con maestría eran hijos de Josefa García, apodada la chepa) y se cantaba en la zona donde
estaba ubicado el resguardo indígena: desde La Padilla hasta El Fraile. Se
caracteriza porque para cantarlo necesita dos personas que lo encabezan y el
coro lo hacen el resto lo los individuos que acompañan el velorio. Se dice que
se canta con dos coros.
La
otra forma de interpretar el rosario de ánimas fue la que aprendieron los llamados vecinos
blancos, descendientes de españoles, que se ubicaron desde el río La Padilla
hasta La Culata, Chinó, incluyendo los
caseríos Las Mesitas de Niquitao y Visún del estado Trujillo. La modalidad de
cantarlo se denomina por coros: cada coro lo conforman dos personas y hay cinco
coros para un total de diez personas, los demás asistentes no intervienen, este
último rosario tarda más tiempo en
ejecutarlo porque va más lento
La
persona que encabeza el rosario debe tener buena voz, mucha devoción y hacer
todo lo posible por no equivocarse. Casi todos los caseríos del Municipio han
tenido buenos cantadores de rosario, en
El Fraile estaba Pedro Meza, en El Potrerito Fidel Rondón, en Mupate, Marcelino
Ocanto; en el pueblo, Jorge Paredes del Chimborazo y Juan (Turiolo) Paredes,
que vivía al final de la Avenida Sucre; en La Conquista y Miyoy, Manuel
Santiago Díaz, Venancio Rondón, Acacio Valero, Eloy Rondón y Eusebio Rondón; en
La Padilla, Jacinto Villamizar y Saturnino Santiago; en Mutús, Pedro Volcanes,
Enriqueta Ángel, Telésforo Zerpa, Pablo Rendón; en Los Pantanos, Nicomedes Rondón;
en Chinó, Félix Moreno; en El Pozo Ramón
Santiago y en La Culata, Pedro Jerez, todos fallecidos. En la actualidad solo quedan:
en La Ranchería, Luis Terán; en Miyoy, Ricardo Santiago y en el pueblo Hermes
Santiago.
En
el rosario se cantan por lo menos tres salves: una que se le canta a la Virgen
del Carmen, la salve de despedida cuando se quita la tumba del difunto en el
novenario y la salve normal del rosario rezado.
. El
día del novenario de un difunto, los
rezanderos llevan, en horas de la noche, la cruz de madera y las guirnaldas
para el cementerio, las colocan sobre la tumba del finado, le cantan un rosario
y sacan otro hasta la puerta de la iglesia, luego se dirigen a la casa del
finado, unos cincuenta metros antes de llegar cantan sólo una casa (misterio) y los familiares vienen
a recibirlos con varios santos en las manos en el momento en que están cantando
las letanías y luego, todo el grupo,
regresa al hogar y entregan el rosario en el altar preparado para recordar al
difunto.
A los rezanderos les dan de comer
antes de ir a sacar el rosario y después de traerlo; les sirven aparte y en
mayor cantidad.
Rosario Glorioso
El rosario glorioso generalmente se canta cuando se
finaliza la novena de un santo con motivo de la celebración de su fiesta
principal, fueron muy famosas y todavía se celebran algunas en honor a la
Santísima Trinidad, San Miguel, San Isidro, Santa Rosalía, San Juan, Corpus Cristi,
entre otros. Generalmente el rosario es una petición del dueño de la casa donde
se celebra el velorio o el mayordomo o responsable de la fiesta del santo.
Generalmente
cada santo tenía un rosario glorioso particular como el de la Dolorosa, La Trinidad,
`pero al morirse los cantadores y no dejar anotadas las oraciones aquellos se
fueron perdiendo.
Al contrario de la tonada de
ánimas, que es de tristeza, la tonada del rosario glorioso es de alegría, se entonan
los versos al final de cada misterio, primero se canta un verso que es el que
le abre la entrada al rosario. Antes de persignarse con un compañero segundero
se canta el Ave María y la entrada del rosario que dice: vuestro divino sagrario vuestra gloria cantaremos en ella
contemplaremos los misterios del rosario...
Primero
se ofrece el rosario, luego se rezan los cinco misterios gloriosos, por eso
también se llama rosario gloriao, y se empieza a cantar los misterios, cada
misterio da con el verso que se canta, el primer misterio de gloria, la
triunfante resurrección del Señor. El segundo la Ascensión del Señor a los
cielos, el tercero la venida del Espíritu Santo al Colegio Apostólico, el
cuarto la ascensión de la Virgen al cielo y el quinto la coronación de la
Santísima Virgen como Reina y Señora de todo lo creado.
Informantes: Hermes Santiago, 69 años. Entrevistas
2010, 2016.
Ricardo
Santiago, entrevista 1995.
Rosendo
Ramón Salcedo, entrevista 1997.