viernes, 25 de mayo de 2018

Manifestaciones Colectivas


DEVOCION A SAN BENITO EN LA CULATA

En el caserío La Culata del Municipio Pueblo Llano era venerada una imagen de san Benito traída desde la población de La Puerta, estado Trujillo. El informante nos dice que la imagen era muy pequeña pero llevaba colgados una cantidad de milagros colocados por sus devotos por los favores recibidos. La imagen llegaba al lugar una semana antes del 24 de junio, día de San Juan. A partir de aquel momento comenzaba una novena de rezos, cada día en una casa diferentes, donde aparte de rezarle toda la noche al santo y degustar la comida que daban los anfitriones, se realizaba un baile denominado “de la media botella”, el mismo consistía en lo siguiente: el anfitrión colocaba una botella de aguardiente en la mitad de la sala, a su alrededor los asistentes formaban una rueda y comenzaban a girar danzando al son de la melodía interpretada por un conjunto con instrumentos de cuerdas. En pleno baile, uno de los danzantes se salía de la rueda, se dirigía al centro, tomaba la botella, se empinaba un trago, colocaba la botella en su sitio y luego se integraba a la rueda para seguir girando, esto se repetía para cada uno de los demás  integrantes.
 Los velorios eran solicitados por los parroquianos con el objeto de pagarle una promesa al santo por algún milagro recibido. El día 24 de junio en la mañana la pequeña imagen era llevada hasta la capilla de La Culata donde se celebraría la misa a Santa Rosalía, imagen que era bajada desde la vecina población de Las Mesitas de Niquitao en el estado Trujillo, de ahí que San Benito, San Juan y Santa Rosalía eran venerados en un solo día generalmente frío y lluvioso en esta zona del paramo merideño.
El año en que  comenzó la celebración, particularmente  a San Benito no fue precisada por el informante, pero sí el final. Refería que al enterarse el sacerdote Gabriel Gómez López --quien regentó la parroquia Santísima Trinidad de Pueblo Llano durante el periodo 1978-1986-- de este tipo de celebración, donde se consumía gran cantidad de aguardiente y se irrespetaba al santo con un baile pagano, prohibió la celebración en 1980 aproximadamente.
Ante tal proscripción, los encargados de traer la imagen desde La Puerta, quienes eran oriundos de ese pueblo, no lo volvieron a hacer, acabándose definitivamente la veneración a San Benito en La Culata, por lo menos de la manera en que se descrito.
Informante: Leonídas Ramírez (+), La Culata, 12 de noviembre de 2009. 

Rafael Ramón Santiago
Cronista Oficial del Municipio Pueblo Llano



miércoles, 23 de mayo de 2018

Patrimonio Construido: Templos y Capillas


SALÓN DEL REINO DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ EN MIYOY

En el mes de mayo del 2007 se construyó el Salón del Reino de Los Testigos de Jehová en el caserío Miyoy del Municipio Pueblo Llano. Es importante acotar que la presencia de esta agrupación religiosa en la entidad data de 1984, año en que llegan, los llamados por ellos, precursores o asignados, guiados por la Palabra de Dios expresada en la Biblia a través de Mateo 24:14 que dice: “Esta Buena Nueva del Reino será proclamada por todas partes del mundo para que la conozcan todas las naciones, y luego vendrá el fin”. Los asignados estaban conformados por la pareja de esposos: Luis Mendoza y Carolina Camaña, quienes se habían conocido en la ciudad de la Victoria, estado Aragua y al poco tiempo llegaron a Pueblo Llano donde permanecieron algunos meses; les habían asignado un área para su actividad proselitista que comprendía desde La Raya (límites entre los estados Barinas y Mérida) hasta Apartaderos. Una segunda pareja, Ramón Mogollón y su esposa Teresa, sustituyeron a los anteriores y permanecieron en el pueblo durante ocho años, venían de Turmero, estado Aragua.
El primer Salón que acondicionaron para las celebraciones estaba ubicado en la calle Carabobo con Avenida Sucre, en una casa alquilada al señor Saturnino Santiago. Allí permaneció muy poco tiempo, luego se trasladaron a la calle Bella Vista, en un garaje de la casa del señor Alcides Paredes Santiago, en este lugar permaneció por espacio de veintitrés años, hasta la nueva construcción en Miyoy, como ya se apuntó.

Rafael Ramón Santiago
Cronista Oficial del Municipio Pueblo Llano

jueves, 10 de mayo de 2018

Personajes de Pueblo Llano


Ramón Jerez Jerez


            El señor Ramón Jerez Jerez era hijo de don Ramón Jerez y doña Ana Gracia Jerez, familia radicada en el caserío La Culata del Municipio Pueblo Llano,  estado Mérida. El joven Ramón, al igual que el resto de sus hermanos pasó la niñez y adolescencia realizando labores agrícolas y en la cría de vacas y ovejas. A leer y escribir aprendió en su hogar, formación que le fue de mucho provecho, pues el 05 de noviembre de 1907 es nombrado Preceptor de la Escuela Nacional de primer grado para varones Nº 589 de Pueblo Llano.
            El 29 de abril de 1911 contrae nupcias con la señorita María Magdalena Quintero, hija de Idalia Quintero. Del matrimonio nacieron Ana Ramona (1914), María Teresa de Jesús (1916), María Eloisa (1921), Oliva Eduarda, Delia Ramona (1925), Josefa Clotilde, Gilberta y Maura.
             La familia se instaló en el pueblo, en una hermosa casa con techo de  tejas, que aún sigue en pie a pesar de varias remodelaciones, ubicada en la avenida Bolívar, entre calles Providencia y Ayacucho. La vivienda también  fungió como escuela durante varios años.   
Don Ramón se preocupó por brindar una esmerada educación a sus hijas y por lo menos dos de ellas se inclinaron por el ejercicio de la docencia: Edilia o Delia y Oliva Eduarda.
La señorita Edilia Jerez Quintero daba clases particulares y también regentó  una escuela de niñas en el pueblo.
            La otra hija, Oliva Eduarda Jerez Quintero, quien nació el 20 de enero de 1923, fue designada oficialmente como maestra en el caserío La Culata por Decreto Ejecutivo fechado el 1º de octubre de 1946. Años más tarde se radicó en la ciudad de Mérida donde dejó una excelente obra educativa en diferentes escuelas, todas pertenecientes a la Dirección del estado Mérida.
            A todas las hermanas Jerez Quintero se les recuerda con mucho cariño por ser jóvenes  muy entusiastas, alegres y colaboradoras, participaban activamente en los actos religiosos de la parroquia Santísima Trinidad de Pueblo Llano y en las veladas que organizaba doña Quintiliana Molina Ortiz para conmemorar festividades especiales.
Volviendo a la labor de don Ramón, es bueno señalar que además de Preceptor, ocupó diferentes cargos en la administración pública del municipio, pues fue Jefe Civil durante los años 1926, 1934 y 1944 y en 1929 secretario de la Prefectura.
            Después que sus hijas crecieron, se casaron y  formaron sus propios hogares, vendió su casa de habitación al señor Sixto Molina, aproximadamente en el año 1957 y se trasladó a la ciudad de Mérida, instalándose en una nueva casa en la avenida dos Lora, entre calles 16 y 17. 
            Desconocemos hasta ahora las fechas de su nacimiento y deceso.

Rafael Ramón Santiago.
Cronista Oficial del Municipio Pueblo Llano