DOCTOR JOSE NATIVIDAD PAREDES PADILLA, SEGUNDO ABOGADO NATIVO DE
PUEBLO LLANO
Una muerte
trágica marcó la infancia del Dr. José Natividad Paredes Padilla, pues su padre
fue asesinado cuando él apenas contaba con un año y nueve meses de edad. Era el
menor de la familia compuesta por siete hijos de don Victoriano Paredes y doña
Vicenta Padilla. Además de José Natividad estaba un varón que murió de corta
edad, luego vinieron Victoria, Nicolás de Tolentino, Juana, Irene y Onésima
Paredes Padilla1.
A doña Vicenta, una vez viuda, le
tocó continuar levantando la familia con abnegación, esfuerzo, responsabilidad
y disciplina, afianzada siempre en los valores del trabajo y la fe católica.
Asumió la administración de las parcelas agrícolas de su propiedad, la cría de
ganado, la educación de sus hijos y además montó una pulpería en su casa para
incrementar las entradas económicas.
José Natividad nació en Pueblo Llano el 08 de septiembre de 1931, Se crio bajo el cuidado de su madre y de sus hermanas
mayores, más tarde contó
con el apoyo de su hermano Nicolás de Tolentino que vino a fungir como el
protector del resto de los hermanos.
Sobre los primeros años de José Natividad nos relata su entrañable
amigo Don Mario de Jesús Santiago Valero: “Nos
conocimos siendo de muy tierna edad, él fue ahijado, y por ende, Doña Vicenta,
comadre de mi papá. Compañeros de escuela, único plantel para varones que había
en Pueblo Llano, al salir por la tarde nos juntábamos para acompañarlo hasta su
casa, él a cumplir con sus tareas escolares, y nosotros, de compras, la mejor
clientela de las suculentas paledonias, tabletas, melcochas y caramelos de la
pulpería de Doña Vicenta. Con plata o sin plata, con puyas, mejor dicho, el
único capital que manejábamos los chavales, nosotros siempre salíamos con los
bolsillos llenos. Gozábamos del más amplio crédito, vistos los quesos, la
mantequilla, los huevos, etc., que respaldaban nuestra cuenta al ‘fiao’. Sin
tomar en cuenta el poder que provenía del sagrado vínculo del compadrazgo que
había entre los cabezas de hogar.
Así que, el niño Natividad, Nato para nosotros y para la
vecindad pueblollanera, no solo fue el compañero de escuela, que asistió mañana
y tarde a las clases y demás actividades docentes, sino que fue además un amigo
muy especial por el hogar y por la familia de la que formaba parte”2.
Doña Vicenta Padilla de Paredes.
Para la década de los
años cuarenta del siglo XX los estudios que se hacían en Pueblo Llano apenas
llegaban hasta el equivalente a un tercer grado de educación primaria y la
única posibilidad que encontraban las familias para que sus hijos varones
pudieran adquirir una formación mayor, y probar si se despertaba en ellos la
vocación sacerdotal, era inscribiéndolos en el Seminario Arquidiocesano de la
ciudad de Mérida. Allí fue llevado José Natividad cuando apenas contaba con
unos diez años, pero el régimen estricto de la institución y la falta de
vocación para el sacerdocio, apenas lo mantuvieron por espacio de dos
años.
Regresó a su pueblo
natal donde según sus propias palabras “pasé los mejores
años de mi infancia y adolescencia”3, allí desempeñó
labores agrícolas y pecuarias en las propiedades de la familia, bajo la férrea
disciplina de su madre doña Vicente. Al cumplir los dieciocho años fue reclutado
para pagar el servicio militar obligatorio.
Casa natal del Dr. José Natividad Paredes Padilla.
Ya, en carácter de reservista, decide emprender
un trabajo independiente tal como relata su paisano y amigo Hermes Ramón
Paredes: “antes de Nato irse a Caracas residía en Barinitas, tenía una
camioneta Panel, roja, marca Ford, donde cargaba retazos de madera, desechados
de los aserraderos de Barinas, para llevarlos a vender a los pueblos de Las
Piedras, Santo Domingo y Pueblo Llano, allí eran utilizados como leña para
cocer los alimentos. Esa camioneta la vendió en 1953 al prefecto de Pueblo
Llano Roberto Zambrano, que por cierto no sabía conducir y tenía al policía
Francisco Paredes (Panchón) como chofer4”.
Posteriormente fue fiscal de tránsito en
Barinitas por allá en 1954 y de allí se trasladó a la ciudad de Caracas donde
continuó trabajando en el mismo oficio de fiscal mientras cursaba estudios de
bachillerato en las noches.
El también amigo y paisano del biografiado,
sociólogo Osman Paredes apunta que el Dr. Paredes Padilla “trabajó en la
oficina de Tránsito Terrestre de esa capital al mismo tiempo que estudiaba
Derecho, bajo régimen nocturno, en la Universidad Central de Venezuela, obteniendo
la borla académica de abogado el 12 de noviembre de 1964”5.
El Dr. José Natividad Paredes junto a su
familia el día de su graduación.
Una vez graduado, ejerció el derecho en calidad de litigante en la capital de la república, atendiendo clientela relacionada con asuntos de tránsito que era su especialidad. Compartía el bufete con un prestigioso equipo de abogados situado en un edificio en la esquina de Marrón, por la avenida Urdaneta6
El Dr. José de la Natividad contrajo matrimonio
el 17 de diciembre de 1966 con la odontóloga Nelia Matos, natural de Rio
Caribe, estado Sucre, pero formada desde niña en Caracas. De esa unión nacieron
tres varones y una hembra: José Félix, José Nelson, José Nicolás y Liliana
Coromoto Paredes Matos. Con anterioridad, el biografiado había sido padre de Lisbeth Girón7.
A pesar del prestigio
obtenido como litigante en el oficio de jurista, no abandonó sus inquietudes de
agro-productor, para tal propósito adquirió una finca en Cocorote, estado
Yaracuy, denominada Finca La Mingoya de unas 230 hectáreas, con el objeto de
utilizarla para ganado de engorde, actividad que también le permitió
incorporarse a las acciones gremiales de los agricultores y ganaderos de la
región8.
Al igual que su hermano el Dr. Nicolás de
Tolentino Paredes Padilla, el Dr. José Natividad también estuvo muy pendiente
de participar en las luchas reivindicativas de Pueblo Llano, particularmente en
el sector agrícola con el que tenía una mayor relación, dadas sus influencias a
nivel nacional, pues fue secretario general de la Federación de Asociaciones de
Productores Agropecuarios de Venezuela (FEDEAGRO)9. Desde allí
estuvo apoyando la creación de Centros de Acopio de hortalizas y otros rubros
en todo el país y en nuestro pueblo en particular, tal como lo expusimos en uno
de nuestros trabajos en 1991: “Entre las políticas agrícolas que ha puesto
en práctica los gobiernos democráticos en los últimos años, posiblemente la que
se veía con mayor oportunidad para ayudar al productor venezolano eran la
relacionada con la creación de los Centros de Acopio (CA) a través de la
Corporación de Mercadeo Agrícola. Estos Centros tenían como finalidad adquirir
los productos, previamente seleccionados y clasificados, directamente del
hombre del campo y a la vez llevarlos al público consumidor a través de los
denominados mercados populares. Esto, por su puesto, traía una serie de
ventajas tanto para el productor como para el consumidor. En primer lugar, había
un mercado seguro para las cosechas, las cuales eran pagadas a precios más
justos, por otra parte, al eliminar la cadena de intermediarios, los productos
eran vendidos a precios asequibles a los sectores populares de las grandes
ciudades.
El plan se inició con muchas expectativas. Se
comenzaron a hacer estudios de factibilidad para crear CA en diferentes
regiones del país. Para el estado Mérida se habían planificado varios debido a
la gran producción que siempre ha tenido esta zona.
El Dr. Natividad Paredes, quien desempeñaba un
cargo importante en FEDEAGRO fue uno de los principales interesados para que se
construyera en Pueblo Llano un CA, pues dentro de la planificación nacional
solo estaba proyectado construir uno en Timotes para abarcar las zonas circunvecinas
entre las que se encontraba Pueblo Llano, esto, como es lógico, acarrearía
gastos de transporte y tiempo que reduciría en gran parte las posibles ventajas
obtenidas. El Dr. Paredes, como ya dijimos, puso todo lo que estuvo a su
alcance para que Pueblo Llano tuviera su propio Centro de Acopio,
independientemente del de Timotes”10.
Centro
de Acopio en el sector La Capellanía, Pueblo Llano.
En 1996 invitó a Pueblo Llano al ingeniero
químico Francisco García para que diera una charla a los agricultores y se estableciera
un posible convenio con el objeto de introducir un producto denominado vinaza11
como fijador de suelos y fertilizante y de esta manera buscar un posible
sustituto de los abonos orgánicos de aves y caprinos utilizados en el municipio
que estaban produciendo una proliferación de moscas muy perjudiciales para la
salud.
Además de las gestiones anteriores, el Dr.
Paredes Padilla siempre estuvo dispuesto a prestar todo su apoyo y
asesoramiento legal posible a personas e instituciones del municipio cuando era
requerido, no hay que soslayar, por ejemplo, su disposición permanente para con
la cooperativa agrícola La Trinidad, el Ateneo de Pueblo Llano, el concejo
municipal, la alcaldía, entre otras instituciones locales.
El Dr. José Natividad
Paredes Padilla murió en la ciudad de Caracas el 28 de mayo de 2016, faltando
tres meses y once días para cumplir los 85 años. Su nombre queda inscrito entre
los hijos benefactores de Pueblo Llano, aquellos que, a pesar de las
dificultades de la época, no se amilanaron y con gran sacrificio salieron
adelante, dejando un gran ejemplo para sus familias; sin olvidar nunca sus
orígenes campesinos contribuyeron al progreso de su patria chica y del país en
general.
No puedo culminar esta reseña sin mencionar la
amistad y el apoyo moral que el Dr. José Natividad tuvo para con este servidor
en mi condición de Cronista Oficial del municipio Pueblo Llano, así lo dejó
plasmado en la siguiente misiva:
“Señor:
Rafael Ramón Santiago
Pueblo Llano, Estado Mérida
Estimado
Paisano y Amigo
A
través del amigo Vicente Paredes, he tenido la oportunidad de leer
detenidamente, dos folletos producidos por Usted y editados por el Ateneo de
Pueblo Llano y la Alcaldía de ese Municipio, en relación con la investigación
histórica, los personajes y las costumbres de mi querida región en donde nací y
pasé los mejores años de mi infancia y adolescencia, sinceramente ambos
folletos me han hecho recordar y retrotraerme a una etapa verdaderamente feliz.
Me permito hacer uso del concepto: las pequeñas
cosas hacen grandes a los hombres y a los pueblos en los cuales se desarrollan,
su investigación histórica, la relación de sus personajes y costumbres de
nuestros antepasados, las cuales fueron la génesis de la formación de nuestro
querido pueblo, sirven de orientación a las generaciones presentes y futuras y
nos recuerdan hechos patéticos de los personajes en ella descritos, con quienes
en alguna forma tuve comunicación en mi etapa infantil.
Con estas manifestaciones de satisfacción por
el contenido de su obra, quiero motivarle más, para que siga adelante
profundizando, no solamente en el ámbito local, sino en el regional y el
nacional, pues observo que Usted tiene madera para hacerlo. Por último, le
manifiesto: Las personas que en algún forma hemos hecho algo para el
engrandecimiento de nuestra querida Venezuela, debemos continuar adelante en
busca de un desarrollo de este País, dentro de un estado de plena democracia,
libertad y de justicia.
Respetado Paisano, reciba usted mi
agradecimiento como pueblollanero, por su labor de enaltecimiento de mi patria
chica, la cual necesita tanto del aporte cultural de sus hijos.
Su
Amigo y Paisano
Dr. José N. Paredes P.
Abogado
[Firma
y rúbrica]
Finca
La Mingoya
Cocorote
Edo. Yaracuy
11-09-2007”12.
Rafael Ramón Santiago
Cronista
Oficial del municipio Pueblo Llano
(20/10/24)
Fotografías suministradas por la Licenciada Elvia Salas Paredes, el señor Erasmo Rondón y el Sociólogo Osman Paredes.
Notas:
1)
Informante: Juana Paredes Padilla, 86 años,
Pueblo Llano, 03 de agosto de 2009.
2) Informante:
Mario de Jesús Santiago Valero, 96 años, entrevista vía WhatsApp, Caracas, 08
de junio de 2024.
3) Carta
a Rafael Ramón Santiago, Finca La Mingoya, Cocorote, Edo. Yaracuy, 11 de
septiembre de 2007. Archivo personal.
4) Informante:
Hermes Ramón Paredes Paredes, 81 años. Pueblo Llano, 30 de junio de 2024.
5) Informante:
Osman Paredes, 69 años, entrevista vía WhatsApp, Caracas, 25 de junio de 2024.
6) Informante:
Hermes Ramón Paredes Paredes, 81 años. Pueblo Llano, 30 de junio de 2024.
7) Informante:
Osman Paredes, 69 años, entrevista vía WhatsApp, Caracas, 25 de junio de 2024.
8) Informante:
Heberto Salas Paredes, 79 años, Barquisimeto, vía WhatsApp, 12 de julio de
2024.
9) Informante:
Osman Paredes, 69 años, entrevista vía WhatsApp, Caracas, 25 de junio de 2024.
10) Rafael
Ramón SANTIAGO. Cooperativa Agrícola “La Trinidad”, 25 años presente en el
desarrollo de Pueblo Llano. Edición de la Cooperativa Agrícola “La
Trinidad”, Mérida, 1991. p. 43.
11) Según exponía el ingeniero Francisco García,
la vinaza se consigue de la manera siguiente: al procesar la caña de azúcar se
obtiene la melaza, luego se fermenta y se utiliza un catalizador que es urea y
sulfato de amonio para activar la levadura, así se produce el alcohol
isopropílico, quedando como residuo la vinaza. La vinaza se combina con aserrín
para solidificarla y esterilizarla, obteniéndose de esta manera, un filtro
biológico natural, completamente neutro. Ha sido utilizado como mejorador de la
estructura del suelo, aunque es muy bajo en micronutrientes, pero mezclado con
abono químico 12/12/17 ha dado muy buenos resultados en la siembra de papa.
12) Archivo personal.